Si os va el enoturismo literario en Galicia no dejéis de acercaros a esta bodega ubicada en el concello de Chantada. La autora Dolores Redondo se inspiró en este lugar para su novela «Todo esto te daré» y a ella peregrinan ahora lectores de todos los puntos de la geografía española o foránea para vivir esta experiencia.
Sobre las laderas del río Miño, en la Ribeira Sacra, encontramos los viñedos de la bodega Vía Romana, una de las más turísticas del entorno, y de las pocas que permanece haciendo visitas todo el año. Viñedos, impresionantes vistas sobre las aguas del embalse de Os Peares, y un entorno lleno de románico y bonitas rutas de senderismo, como la de los Viñedos de Belesar.
Nacida en 1997, esta pequeña bodega de tradición familiar se instala en una casa del siglo XVI, colgada sobre la ladera del río Miño y mirando hacia el pueblo de Belesar.
Su vendimia es manual en bancales de viticultura heroica, y producen fundamentalmente vino tinto, mencía joven y barrica, además de una pequeña cantidad de godello y rosado.
Su primera cosecha fue en el año 1998, y está integrada en la denominación de origen Ribeira Sacra, subzona Chantada. La familia bodeguera Méndez-Rojo, a la que pertenece, a día de hoy tiene bodegas en todas las zonas de vino reguladas de Galicia.
En 2016 la novela Todo esto te daré obtuvo el Premio Planeta y se convirtió en un superventas generando además una creciente corriente de visitantes a la Ribeira Sacra, atraídos por el entorno de La Heroica, la bodega de la novela.
En el propio establecimiento podemos encontrar diferentes ediciones del libro, además de su catálogo de productos vinícolas, pues parte de sus visitas proceden de esta tendencia de enoturismo literario en Galicia.
Y es que en la Ribeira Sacra encontramos otros enclaves muy literarios como el Bosque de los Cuatro Vientos, en Santo Estevo de Ribas de Sil, del que ya os hemos hablado por aquí, pero en la zona del Miño este es el más destacado.
La bodega está al paso del Camiño de Inverno, variante elegida por algunos peregrinos para evitar las cumbres nevadas de Pedrafita, y que viene desde O Barco de Valdeorras hasta esta orilla chantadina, bajando desde Diomondi por los codos de Belesar.
En su ascenso desde el puente amarillo a mitad del pueblo, sube por entre las casas y pasa junto a esta bodega, donde invitan a algo a los peregrinos en las épocas más tranquilas. Otros muchos se detienen a visitar este rincón de enoturismo literario en Galicia para reponer fuerzas.
Como en otras bodegas de este territorio, es necesario reservar previamente a la visita, especialmente en los momentos de mayor afluencia del año. Esto puede hacerse a través de su página web o llamando por teléfono.
Hay diferentes horas de visita, y en cada una de ellas se pueden degustar algunos de sus vinos, a unas horas se prueban dos y a otras cuatro, según corresponda a sus visitas esencia o premium. Si vais con niños les ponen un mosto tinto, todo acompañado de galletas marineras, una especialidad de pan típica de Chantada.
En el aparcamiento de la bodega podemos dejar el coche y acercarnos ya a fotografiar el bellísimo paisaje mientras esperamos. La visita empieza en el porche, donde se descarga la uva durante la vendimia, y sigue en la propia bodega entre las cubas, en la sala de embotellado, para terminar en la sala de catas, un bajo cubierta muy acogedor.
De entre los visitantes de esta bodega, buena parte proceden del catamarán del Miño, al que han adaptado sus horas de visita. De este modo es posible complementar varias experiencias.
Mucha gente opta además por comer en la zona, bien en el bar del embarcadero de Belesar, en Adega da Veiga o los Pendellos de Chantada, tres sitios muy recomendables.
También es posible acompasar esta visita de enoturismo literario en Galicia con la ruta del románico de la Ribeira Sacra, empezando por iglesias del propio municipio como Nogueira de Miño, Pesqueiras o Santo Estevo de Ribas de Miño.
El Museo del Vino de la Ribeira Sacra
