La Costa da Morte coruñesa te regalará paisajes maravillosos. Algo venteados en invierno pero muy salvajes y naturales. La laguna de Traba está a pocos kilómetros de Laxe, concretamente 8 si seguimos la ruta señalizada como PR-G 114 que va por la costa desde el casco urbano hasta la playa y la laguna de Traba. Con niños, tomaremos solo el tramo sobre la pasarela de madera hasta el refugio para observar aves.
Saliendo de Laxe hacia Camariñas y desviándonos hacia Boaño, en dirección a la costa. Al final de la carretera hay un merendero y además del acceso a la playa arranca una pasarela de madera. Si la seguimos, en algo más de medio kilómetro, llegaremos a la caseta para observar la laguna y las aves que en ella habitan.
Un paseo muy instructivo
El paseo cuenta con bancos, papeleras y paneles informativos sobre la fauna marina y las aves. La ruta es perfecta para hacer con niños pequeños por su corta extensión y además es un aliciente poder tratar de identificar las gaviotas patiamarillas, los alcatraces, los charranes, etc. o también cetáceos como los delfines. Se describe también flora y fauna típica de la playa en paneles sobre la barandilla de la propia pasarela.
En los alrededores puedes recorrer el pueblo de Laxe, del que ya hemos hablado aquí, sus parques infantiles, el paseo marítimo o el faro y su merendero. También merece la pena visitar Camariñas y su puerto pesquero, y la espectacular costa de Camelle, donde está el célebre museo del alemán Man, al que también hemos dedicado un post.
Las piedras mágicas
Cerca, en Mórdomo, arranca también una ruta de senderismo ya algo más larga y complicada porque asciende por la ladera del monte hasta la Pedra da Moa. Una hora de ascenso por caminos bastante pedregosos pero que garantizan unas vistas espectaculares de todo el entorno de Traba. En todo el trayecto hay formaciones graníticas de diferentes y sugerentes formas salpicadas por la ladera.