Muy cerca de Silleda y Lalín está la impresionante Fervenza do Toxa, un espectáculo natural que lleva al río Toxa a despeñarse por una pared rocosa de 60 metros. Según indica la Wikipedia es la más alta de Galicia y unas de las mayores cascadas de España. Para poder ver este rincón de la comarca del Deza hay que ponerse calzado adecuado y caminar de 3 a 4 kilómetros con un desnivel importante pero un camino cómodo.
La Fervenza do río Toxa está en Bandeira y se accede desde la nacional 525 que une Ourense con Santiago, en las inmediaciones de Silleda. Hay que tomar el desvío a Vila de Cruces en el centro del pueblo (PO-204). Tras pasar las canteras y junto a una casa adosada a una granja hay un desvío a la derecha que pone Pazos, y bajo el cartel uno de madera que indica Fervenza do Toxa. A partir de aquí está bien señalizado.
Hay varias rutas, nosotros dejamos el coche en el aparcamiento donde hay una barrera de madera para impedir que los vehículos sigan por la pista y bajamos caminando. Tardamos una hora en bajar y subir con dos niños de 6 y 8 años. La cuesta es bastante pronunciada en algunos puntos pero es una pista amplia de gravilla bastante accesible salvo por un pequeño tramo de escaleras al final. Al llegar abajo hay un mirador a ras de agua y un pequeño merendero. De camino verás numerosos árboles como roble, castaño, abedul, pino y eucalipto.
Hay numerosas rutas de senderismo señalizadas por la zona, porque además está cerca del monasterio de Carboeiro, puedes ver información en los paneles que encontrarás por el camino o también en la web del concello de Silleda. En este municipio puedes visitar también el Museo Galego da Marioneta, ubicado en el Pazo de Liñares, y que alberga una buena muestra de antiguos teatros de títeres, marionetas y máscaras.