¿Qué tal si nos vamos de ruta por las bibliotecas históricas de A Coruña? En los tiempos de internet y las pantallas digitales podemos pensar que los libros han perdido terreno. Pero lo cierto es que más que nunca son pequeños museos de palabras, historias y mundos fascinantes, que también podemos recorrer en visita guiada.
Antiguos libros con enseñanzas técnicas, primeras ediciones firmadas o anotadas por diferentes personalidades del mundo o la cultura, o fotografías, dibujos y hasta partituras musicales. Las bibliotecas y archivos son auténticas cápsulas del tiempo que podemos investigar y descubrir acercándonos a sus fondos y actividades.
Como hoy en día tendemos a buscar más cosas en internet que en los libros en papel, lo cierto es que muchas personas puede ser que lleven un tiempo sin pisar una biblioteca. Desde esta web siempre hemos sido muy partidarios de llevar a los más pequeños de visita a museos, y también a la biblioteca del barrio, pero hay una opción muy en boga que utilizan algunos agentes culturales para mostrar los fondos de las bibliotecas históricas de A Coruña y son las visitas guiadas, conferencias, muestras o jornadas de puertas abiertas.
Algo así nos ha llevado estos días por la Biblioteca de la Deputación de A Coruña, una visita guiada con motivo del Día de las Letras Galegas, y gracias a ella descubrimos todos sus tesoros y hemos pensado que sería buena opción contaros qué bibliotecas históricas tenemos en la ciudad y que se puede encontrar en ellas.
Por antigüedad vamos a empezar por la del Real Consulado, que muchos recordarán de aquellos tiempos en que era una de las bibliotecas públicas más frecuentadas. Después recorreremos muchas que siguen abiertas aunque solo para investigadores o bajo demanda, y también podríamos hacer mención a las que ya no están, como la Casilla Biblioteca de los Jardines de Méndez Núñez, ubicada en un edificio levantado allá por los años cuarenta por el arquitecto Antonio Tenreiro.
Quizá la más fascinante y desconocida de cuantas tenemos en la ciudad, y la primera pública que se instaló en A Coruña.
El Real Consulado de La Coruña fue creado en 1785, con cédula de Carlos III y a instancias de una burguesía coruñesa que tenía interés en la difusión de la cultura. Su finalidad viene dada por las corrientes ilustradas de la época y era poner el conocimiento al alcance de los ciudadanos, cubriendo aspectos culturales, educativos o humanitarios desde ese enfoque del siglo XVIII.
Desde sus orígenes atesoró y dispuso de manuales para enseñanzas técnicas, y su biblioteca pública se inauguró en agosto de 1806, fundada por Pedro Antonio Sánchez, que además dejó fondos para su sostenimiento.
Con volúmenes desde el siglo XVI, su catálogo incluye buenas muestras de la introducción del saber ilustrado en Galicia, tanto en la parte de autores clásicos, como en Teología, Economía Política, Física, Química, Medicina, Farmacia, Matemáticas, Astronomía o Navegación.
Entre algunos fondos, que destacamos en esta recopilación de bibliotecas históricas de A Coruña, aquí podemos encontrar planos de la reforma de la Torre de Hércules por Giannini, un manuscrito inédito de Quevedo, o diferentes mapas y grabados de gran interés histórico.
Situada en el edificio del teatro Rosalía de Castro, esta biblioteca se funda en 1845 y se dota con fondos de algunos de los conventos y edificios eclesiásticos desamortizados. Aunque compartió espacio con el material del archivo, hoy esta parte está en la sede de la calle Sir Archer Milton Huntington, y aquí encontramos un hall, bebeteca, hemeroteca, varias salas de lectura, fondos especiales y bibliotecas destacadas de personalidades como Wenceslao Fernández Flórez, Emilia Pardo Bazán o César Antonio Molina y Mercedes Monmany, además de una sección de partituras musicales.
Entre las curiosidades que suelen mostrar en algunas visitas, encontramos interesantes ediciones del Códice Calixtino, las Cantigas de Alfonso X El Sabio, una edición de bolsillo coruñesa de 1911 editada por Tipografía del Noroeste, la revista de la Ilustración Gallega y Asturiana, diferentes libros de artista como uno con dibujos de Laxeiro o partituras de Canuto Berea.
Los fondos más especiales solo los enseñan en las grandes ocasiones, y por eso hay que estar pendiente de sus visitas guiadas, y abarcan volúmenes como una edición facsímil de la biblia Kennicott, elaborada en A Coruña allá por el siglo XV, diferentes copias del mapamundi de Tolomeo, un postincunable de Luis Vives censurado por la Inquisición o una copia en miniatura del libro de horas de Felipe II.
La casa museo de la escritora coruñesa comparte edificio con la Real Academia Galega y acoge buena parte de su biblioteca. El conjunto, unos 8.000 volúmenes, fueron declarados Bien de Interés Cultural en 2022, y de ellos una parte se conserva aún en el Pazo de Meirás, residencia de verano de la condesa.
Libros del siglo XVII, XVIII o XIX, firmados por autores contemporáneos a Doña Emilia, en algunos casos con dedicatorias o autógrafos. Si visitáis la casa museo podéis ver parte de su biblioteca, además del despacho con ventana a la iglesia de Santiago, el salón o un buen número de curiosidades.
Fue constituido en el año 1775 para acoger los documentos de la Real Audiencia de Galicia y está declarado Bien de Interés Cultural desde 1985.
El edificio actual que vemos con fachada al Jardín de San Carlos es un proyecto del arquitecto Antonio Tenreiro en el que se vuelve a diseños historicistas tras proyectos más encuadrados en las vanguardias. Se inauguró en 1955 como archivo y biblioteca, de hecho durante décadas fue la biblioteca más frecuentada por generaciones de coruñeses.
Actualmente funciona solo como archivo, con zona de conferencias y exposiciones, dependencias técnicas para la conservación de los fondos, y un catálogo que ha sumado documentos privados de entidades como algunas empresas históricas gallegas, documentos notariales desde el siglo XVI, fondo del Colegio de Arquitectos de Galicia, documentación del antiguo sanatorio de Oza, o fondos familiares como el de Casares Quiroga.
En su página web podemos ver algunas de las actividades que organizan, como las visitas guiadas que se organizan 3 ó 4 veces al año, además de diferentes que se realizan online. En el caso de la del Día Mundial de los Archivos, el 9 de junio, realizan una presentación en una sala de conferencias, explicando cómo fue el tránsito de los antiguos archivos al edificio actual, renovado en los primeros años del 2000.
Y después, una vez vistos los archivos, se sube a restauración, donde los técnicos explican cómo intervenir ante un libro deteriorado, cómo injertar papel y recuperarlo, cómo lavar o restaurar determinadas publicaciones de interés histórico, etc.
En el Cuartel de Atocha, en la plaza que antiguamente se llamaba de Millán Astray, se encuentra este edificio que ocupa toda la manzana. Dentro del mismo se encuentra otra de las bibliotecas históricas de A Coruña que os recomendamos. Es de acceso libre en horario de mañana, aunque requieren registro previo y cuenta con consulta en sala, préstamo o servicio de reprografía.
El conjunto suma unos 37.000 volúmenes, parte de ellos anteriores al siglo XX. Aunque su temática es mayoritariamente militar, cuenta con libros de historia y mapas dedicados a la formación de los soldados, así como un fondo de contiendas históricas como la Guerra de la Independencia, las Guerras Carlistas, la Guerra de Cuba o la Guerra Civil.
La institución figura también en el registro de Bienes de Interés Cultural de Galicia, declarada en 1985, y sus orígenes se remontan al 1895, cuando estaba ubicada en el Instituto Eusebio da Guarda.
Desde 1995 se ubica en un edificio en el Barrio de las Flores de A Coruña, y es de dependencia estatal pero la gestiona la Xunta de Galicia. Cuenta con buena sección de Hemeroteca y Fonoteca, además de catálogos de libros para diferentes edades, algunos de ellos accesibles.
Entre sus fondos especiales figuran los de algunas personalidades como Santiago Casares Quiroga, Francisco María de la Iglesia, Isidro Conde, Miguel González Garcés o Mariano Tudela.
Situada en la calle Durán Loriga, ocupó el antiguo edificio de Hacienda, que en 1975 pasó a ser municipal y en la primera década del 2000 se adaptó como biblioteca. Alberga también el CGAI, Centro Galego de Artes da Imaxe, el archivo municipal y la sede de la Asociación de la Prensa de A Coruña.
El inmueble se terminó de construir en 1934, es de corte clasicista y ecléctico, y lleva la firma de Miguel Durán, hijo del matemático Durán Loriga. Si accedemos por la puerta principal encontramos al fondo unas escaleras que nos llevan hasta la biblioteca de Estudios Locales.
Los fondos de esta otra de las bibliotecas históricas de A Coruña, de acceso público, incluyen todo lo referente a la historia de la ciudad, la evolución urbana de la misma a lo largo de los tiempos, los antiguos acuerdos municipales y documentos relevantes, cartelería de las fiestas, y la figura de la Torre de Hércules. Además, a ella se han incorporado fondos privados como los procedentes de María Barbeito, Linares Rivas, Alfonso Rodríguez Catoyra, Carlos Díaz Martínez, Ramiro Cartelle y la familia Padín Viaño.
Biblioteca del santuario del Conforto (A Pontenova)
Biblioteca del antiguo convento de A Guarda
Biblioteca y Archivo de Betanzos Museo das Mariñas
20 Cosas que hacer en Coimbra: biblioteca Joanina
Biblioteca do Mosteiro de Lourenzá
Se forma a partir de los monasterios de Samos y Lourenzá, además de la del convento de San Francisco de Lugo.
Creada como biblioteca pública en 1944, dispone de un fondo con incunables, manuscritos y libros de los siglos XVI a XIX.
Además cuenta con aportaciones donadas por Benito Menacho Ulibarri (6.841 volúmenes), y la biblioteca particular de José María Montenegro (2.414 volúmenes).
Fundada en 1845, estuvo primero en el antiguo Colegio de San Fernando. También se nutrió de la desamortización, con unos 12.000 volúmenes procedentes de Melón, Celanova, Oseira, San Clodio, Santo Domingo y San Francisco.
En 1927 se produjo un incendio en el que se perdieron unos 17.000 volúmenes. En 1977 se construye un nuevo edificio y se inaugura la nueva biblioteca un año después. Y en 2019 se traslada a un nuevo edificio para aumentar espacio y servicios.
Su origen está en el instituto provincial, en 1845, asentado en el antiguo colegio de los Jesuítas, con fondos de los conventos desamortizados de la provincia.
La primera vez que se abrió al público fue en 1849, y posteriormente se fue enriqueciendo con donaciones. Tras estar en varias ubicaciones, y permanecer cerrada, reabrió en 1931. El edificio que ocupa actualmente se inauguró en 1988.
Desde 1995 se dedica a la figura del bibliógrafo Antonio Odriozola, que realizó estudios sobre la imprenta y realizó diferentes descubrimientos tipobibliográficos.
Entre otras cosas, posee una hemeroteca de cabeceras de diarios de la provincia desde 1897, así como otras revistas y publicaciones antiguas digitalizadas en Galiciana.
Esta biblioteca funcionó en el Colegio San Clemente hasta su traslado a la Universidad, estuvo en la antigua Facultad de Filosofía y, después de una historia larga, actualmente la encontramos en Avenida de Xoan XXIII.
Reúne una buena muestra de publicaciones dedicadas a Santiago de Compostela y el Camino de Santiago.
Está situada en la Cidade Da Cultura de Galicia, en el Gaiás y custodia libros que se editan en Galicia o tratan sobre temas gallegos o están escritos en nuestra lengua.
Cuenta con fondos de las bibliotecas de Celso Collazo, Isaac Díaz Pardo, Agustín Sixto Seco, Basilio Losada, Xesús Alonso Montero, Luis Losada Espinosa y Rodolfo Núñez de las Cuevas.
Formada a partir de la Biblioteca Popular de Vigo, fue creada en 1942. Desde 1995 está en la sede actual como Biblioteca Central de Vigo, y en 2013 recibe el nombre de Juan Compañel, un editor gallego instalado en Vigo en 1856, que dirigió diversas publicaciones progresistas y editó el libro fundacional del Rexurdimento, el poemario Cantares Gallegos.