Altísimas montañas, viñedo y pizarra. Esta zona de Valdeorras tiene una variedad vinícola con denominación de origen, pero también algunas de las reservas naturales de Galicia consideradas únicas.
El Teixadal de Casaio, el parque natural de Enciña da Lastra, o Pena Trevinca, la cumbre más alta de toda la comunidad. Hoy nos sumergimos de lleno en uno de sus pueblos más emblemáticos, Casaio, o Casayo, como mucha gente lo denomina.
Esta aldea de montaña denominada Casaio, se encuentra donde muere la carretera, un ramal de la OU-122 que va hasta Pena Trevinca, abandonando luego las tierras gallegas para adentrarse en Castilla y León. El conjunto de casas está a más de 1.100 metros de altitud.
Pertenece a Carballeda de Valdeorras, el municipio gallego más fronterizo, pues se adentra hacia el este en la provincia de León, y concretamente en la emblemática comarca de El Bierzo. Su paisaje está condicionado por la actividad de las canteras de pizarra a lo largo del siglo XX y hasta la actualidad.
Para llegar desde fuera de la comarca lo más cómodo es hacerlo por la A6, a la altura de Villafranca del Bierzo, y tomar la CN-536 hasta Sobradelo, un lugar pintoresco junto al puente sobre el río Sil. Desde aquí por la carretera de la estación de Alta Montaña de Pena Trevinca hay unos 16 km hasta Casaio.
Una sucesión de curvas entre montañas de escombros de pizarra, canteras, maquinaria pesada y bloques de piedras y cantería, algunos pueblos pequeños como Viladequinta y el elenco de claroscuros propio de la primavera en las faldas de la montaña, estos días teñida de amarillo por el color de la xesta o retama.
Desde la plaza del Campo da Feira, nos encontramos frente a la iglesia de Santa María. La historia de este lugar tiene raíces suevas, y el templo es de origen románico y oculta en su interior un retablo de estilo manierista, de la escuela de Gaspar Becerra.
Hay unos apartamentos rurales llamados Casa Gelita, donde nosotros nos alojamos, un supermercado, una fuente, un colegio en la parte alta. La industria por excelencia es la obtención de pizarra, y la estética una peculiar arquitectura tradicional en las casas de corredor, típicas de Manzaneda, de piedra y con balconadas de madera, y una naturaleza de montaña para quedarse boquiabierto.
Estamos muy cerca de la cima más alta de Galicia, Pena Trevinca, con 2.127 metros de altitud. Y todo este entorno alberga rincones muy especiales. Desde el mismo centro neurálgico del conjunto, su iglesia, hay señalizadas dos rutas muy especiales: la del río San Xil, a unos 7 km y el Teixadal de Casaio, a 12 kilómetros.
Booking.comÉste último es un reducto de tejos único en Europa, de difícil acceso y para el que hay que ir preparado, pues es un territorio en medio de la naturaleza más salvaje y donde es fácil perderse. Un lugar del que en la zona están bien orgullosos y quieren conservar.
El tejo -o teixo- es para los gallegos un árbol sagrado. Tradicionalmente se asocia a la vida, porque puede vivir miles de años, pero también a la muerte, porque es muy tóxico y de hecho se ha usado como veneno a lo largo de la historia. Tiene dos vertientes, la farmacológica, por su utilidad como antitumoral, y la tóxica, por los efectos de sus hojas, corteza o semillas.
Pero además hay otros motivos por los que muchos caminantes acuden a esta zona, y es conocer de primera mano la historia del oro negro, el wolframio gallego, y uno de sus exponentes como es la antigua mina de Valborraz, o de los alemanes, en Casaio.
manuel vega alvarez
agosto 18, 2019hay otas dos fuentes mas la del sibalcon es la mas bonitay el santo cristo do chao donde juzgaban a los reos y muchas mas cosas esb un pueblo lleno de incognitas yo naci en casaio
Carmen Delia Díaz
agosto 19, 2019Tomo nota Manuel, nos quedamos con ganas de estar algún día más por allí. La verdad es que ya vimos que tiene muchísima historia detrás. Gracias por tu comentario.