Seguro que muchos habéis estado haciendo vuestros planes para recorrer algún tramo de esta fantástica ruta entre Malpica y Fisterra con niños. ¿Será segura? ¿Puedo hacerla por libre? ¿Habrá algún sitio para comer? Esas eran nuestras principales incógnitas y muchas veces hasta que no recorres realmente un camino no es fácil hacerse a la idea de si lo podrás recomendar o no para ir con niños, algo que nosotros nos tomamos muy en serio. Pues bien, hoy al fin hemos cumplido un viejo sueño de iniciar la primera etapa de este camino con los peques. Esta es solo una primera etapa pero os iremos contando más. Nos vamos por el Camiño dos Faros con niños y os lo vamos contando etapa a etapa.
Desde que escuchamos hablar por primera vez de esta ruta, hace ya algunos años, nos cautivó su magia. Al parecer el duende Traski tuvo mucho que ver en que algunas personas comenzaran a dejarse invadir por la belleza de este litoral, sin duda de los más salvajes de Galicia. Nos estudiamos a fondo su página web O Camiño dos Faros, y nos pusimos manos a la obra hasta adaptar una etapa para hacerla con los peques de 7 y 9 años.
La apertura de este camino que está ya siendo una tendencia fuerte entre los senderistas y peregrinos en Galicia es un mérito de la Asociación que lleva su nombre, que en 2012 se propuso abrir este recorrido como GR, con los 200 km que unen Malpica con Fisterra por el borde del acantilado, disfrutando así de este increíble paisaje y las playas más salvajes de A Costa da Morte.
Mini-ruta entre Ceiruga y BeoLa primera etapa entre Malpica y Niñóns de la ruta oficial es de casi 22 km, así que tratamos de buscar nuestra propia ruta dentro de ella. El tramo que nos propusimos hacer era tan solo de unos 4 km ida y vuelta porque no sabíamos bien lo que nos íbamos a encontrar y queríamos elegir un trazado lo más llano posible. Además teníamos que hacerlo circular para volver a por el coche en el punto de partida.
Si hay marea baja puedes aparcar en la playa de Ceiruga y cruzar el río Devá. Es un arenal muy resguardado y el de mayor extensión del concello de Malpica. Si como nosotros, vas en marea alta y ves imposible cruzar, puedes ir con el coche hacia Beo, desviarte a la izquierda, y acercarte a la playa por el lado más al este donde hay varios puntos de la carretera donde aparcar. Desde aquí, casi pegado a la playa, nos incorporamos a una senda sobre el acantilado que es bien visible y comenzamos a caminar en dirección a la playa de Beo.
Otra opción, si quieres hacerla al revés que es como es la ruta realmente, es aparcar en la playa de Beo, que está bien señalizada, y caminar dirección Ceiruga. Pero si vas de bocatas te gustará más nuestro plan porque al llegar a Beo hay un merendero chulísimo donde puedes comer, pararte un rato en la playa, y regresar después hasta el coche.
Tras las huellas de TraskiLa historia de este «duende senderista y misterioso» nos sirvió de ayuda para animar al personal con la ruta. Al poco de iniciar la senda encontramos las primeras huellas verdes de estos revoltosos trasnos, y los peques directamente alucinaron porque entendieron que la historia era cierta.
La verdad es que el camino no fue fácil porque hay tramos con muchos pinchos, silvas, cardos e incluso ortigas, y los peques por su altura se pinchan más y a veces no quieren seguir. Así que tuvimos que tomarnos nuestro tiempo hasta llegar a otros puntos donde se camina fácilmente y sin este problema.
El acceso al lavadero junto al acantilado, muy cerca ya de la playa de Beo, tiene otro punto de dificultad por los pinchos y la vegetación. Es un rincón precioso pero nosotros a la vuelta lo evitamos y regresamos directamente por la carretera. Otro punto en el que puedes perderte es poco después, tras ascender hacia una casa moderna con una gran finca, el muro blanco y altas tuyas en su perímetro.
La carretera sigue a la derecha pero la ruta nos llevaba hacia la izquierda. Lo cierto es que rodeando esta casa fue imposible retomar la costa porque acabas en una huerta que está llena delimitada. Así que tuvimos que desandar lo andado hasta la puerta de la casa, y de frente verás una losa de piedra de medio metro. Si la saltas retomas un camino que te lleva a la carretera de la playa. Traski también lo saltó porque vimos el punto verde así que íbamos por buen camino.
Área Recreativa de BeoEn esta zona hay bastantes perros así que debes ir alerta si no quieres pegar un respingo cada vez que empiecen a ladrar los de cada casa. Al pasar una casa con dos plantas de piedra y el resto de cemento ya verás por su lateral una bajada a la playa. Es una escalera en zig – zag con un mirador precioso que nos lleva directamente al área recreativa.
En este espacio hay cuatro mesas para comer y sus correspondientes barbacoas. Una fuente de agua que funciona y más abajo dos duchas y un grifo que también tenían agua cuando nosotros estuvimos. La playa de Beo es preciosa pero apenas tiene aparcamiento así que en pleno verano será complicado llegar, pero no estos días fantásticos de primavera o fuera del mes de agosto.
Ermita de San AdriánNosotros ya no seguimos desde Beo hacia Malpica sino que volvimos por las pistas de modo que puedes ver en el mapa de abajo. Pero si os apetece seguir la ruta al volver al coche podéis acercaros al santuario de San Adrián, un mirador precioso sobre el mar y frente a las Islas Sisargas con zona de merendero y una pequeña iglesia.
Además de los merenderos que hemos ido mencionando, si no os animáis a comer de bocatas, hay un restaurante en la playa de Ceiruga. Es un local con terraza donde se come bien y está casi a pie de playa. Tiene bastante movimiento, no es barato y tiene una carta basada en un par de pescados, tres platos de carne y diferentes tipos de arroz.
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Si os animais con esta ruta es importante que llevéis botas de montaña y pantalón largo. También os ayudará un palo o bastón para apartar las silvas. Un móvil cargado con datos para seguir el mapa, cámara de fotos y agua, ropa de abrigo y algo de comer. Si hace calor no olvidéis un bañador y toalla por si os antoja un chapuzón en la playa. Y con los niños recomendamos precaución con los acantilados, además en algunos la roca es arcillosa y podría haber desprendimientos.
Nosotros iniciamos esta ruta en estos puntos y regresamos por las pistas según podéis ver en el mapa. Si vais por las pistas podéis llevar carrito de bebé, si os metéis por el acantilado no. La playa de Beo tiene un acceso con rampa al mismo arenal, aunque un poco abrupto. Tenéis más info sobre la zona en nuestro post sobre Malpica con niños.
