Si te gusta la naturaleza en O Courel puedes tener sobredosis. Pueblos de piedra y pizarra, bosques increíblemente salvajes o amables zonas naturales junto a un río. Todo eso y castañas, muchas castañas. La gente de esta zona es amable y acogedora. En El Caurel con niños trataremos de contar nuestra experiencia en la zona y enumerar los recursos turísticos si visitas este entorno en familia.
Por su parte norte, se accede desde la A6 tomando la salida de Pedrafita do Cebreiro, desde aquí está bien señalizado. Toda la zona es muy escarpada y las carreteras estrechas y nada recomendables para temerosos de los precipicios. También desde la Ribeira Sacra y la zona sur de Lugo está bien señalizado, pues esta zona está integrado en el Geoparque Montañas do Courel.
Dicen que es el último bosque atlántico, o al menos un bosque autóctono de lo más natural que queda en nuestra comunidad. Tuvimos la oportunidad de recorrerlo con Lourdes, una bióloga que lo conoce muy bien. Este entorno es la naturaleza en estado puro: el silencio, el viento, el murmullo del agua, algún chasquido de una rama de un árbol de vez en cuando… Se puede hacer una ruta aunque no si no estás en buena forma o con niños menores de 7-8 años pues es un entorno bastante duro en cuanto a subidas y bajadas.
Desde el Alto do Couto está bien señalizado el recorrido con paneles indicativos y también a lo largo de la ruta con postes y señales. Curiosamente y a pesar de la dureza del camino encontrarás muchos grupos siguiendo la senda. Hay dos rutas circulares señalizadas como Rogueira 1 y Rogueira 2. En Moreda (Folgoso) hay un centro de interpretación donde pueden informarte.
Este pequeño pueblo de apenas 20 ó 30 casas está enclavado en la ladera de una montaña entre O Courel y O Incio. La carretera es difícil pero allí el terreno es tranquilo y ver un auténtico pueblo restaurado según la tradición es una buena recompensa. Calles estrechas y empinadas, alfombradas de piedra, casas con pórticos cubriendo la calle, pequeñas ventanas para afrontar el duro invierno. Seceda es un pueblo con vistas y en el que merece la pena pararse a dar un paseo.
En Casa Calellón, en la misma carretera, puedes tomar algo o alojarte si deseas recorrer la zona y necesitas unos días de tranquilidad. Además, el pueblo cuenta con numerosas casas restauradas en venta, otras están en proceso de rehabilitación pues es fácil -aún siendo de lejos- enamorarse de aquel lugar.
Con niños pequeñosLa mejor zona para este perfil de visitante es Acampamento, en Esperante (Folgoso). Allí puedes alquilar bungalows, dormir en tienda de campaña o simplemente comer, pues tiene un excelente restaurante. Zona de columpios, piscina, merendero y cabañitas para jugar los más pequeños, a este recinto no le falta nada para descansar unos días en total tranquilidad y casi sin cobertura.
Para caminar haciendo una pequeña ruta está muy bien el paseo junto al río que parte del Centro de interpretación de Moreda. La ruta es larga pero los primeros tramos son suaves y puedes hacer uno o dos kilómetros hasta donde lleguen los peques. Hay muchos castaños, un río y contrucciones denominadas sequeiros, donde se almacenan y secan las castañas para usarlas durante todo el año, pues son un elemento básico de la gastronomía tradicional de esta zona.
Con el nombre de Geoparque «Montañas do Courel» se engloba un territorio que abarca Folgoso do Courel, Quiroga y Ribas de Sil y que es Geoparque Mundial de la UNESCO.
La riqueza geológica de este territorio es bien entendible si visitamos el Caurel con niños en una visita al Museo Geológico de Quiroga. Minería, geología, paisaje o etnografía son algunos de los temas que podemos rastrear por la zona.
La aldea de A Seara, edificada con pizarra; la cascada de Vieiros y su molino; o el mirador de A Golada, son algunos de los puntos de interés de este territorio. Si lo recorréis con niños y buscáis un parque de juegos, es una buena opción el ubicado en San Clodio, junto a la playa fluvial, con rocódromo, juegos de arena y zona de merendero, además de señalización del Geoparque.
