El tramo más desconocido del Paseo Marítimo de A Coruña
Ahora que se cumplen los 25 años de uno de los hitos que marcó la fisonomía de la ciudad de A Coruña, la construcción de su paseo marítimo, queremos detenernos en uno de sus tramos más espectaculares y posiblemente el más desconocido. Aficionados al running, ciclistas o caminantes solitarios son los más asiduos de esta infraestructura que discurre entre Labañou y O Portiño, pasando por las espectaculares islas de San Pedro.
El Paseo Marítimo de A Coruña comenzó a construirse en 1990 y se fue inaugurando en diferentes tramos. La zona del Orzán – Esclavas fue la primera que vimos terminada y seguramente pocos recordamos ya cómo era anteriormente la playa de Riazor y su carretera. Después fue San Roque de Afuera, un tramo de gran belleza y menos frecuentado; La Maestranza hasta la fuente de los surfistas, resplandeciente y bullicioso en verano; o el polémico espacio del Millenium con su particular obelisco y terminado ya por el año 99.
El tramo del que nos ocupamos hoy va más allá de este monumento hacia el ascensor panorámico del Monte de San Pedro, donde hay un amplio aparcamiento, y sigue hasta la Punta do Burro, en el entorno de O Portiño. Un paseo que es especialmente fotogénico y luminoso al atardecer, cuando sus islas Aguión, Vandabal y do Pé, pero también A Zambela y a Illa Redonda, se van tornando anaranjadas.
Un tramo solitario, frecuentado por parejas o solitarios runners, algún fotógrafo y locos apasionados de los lugares por descubrir como nosotros. Debo reconocer que siempre tuve ganas de recorrerlo a pie hasta el Portiño, pero no fue hasta estos días que Tere nos animó a caminar hasta el mismo pie de lo que fue el vertedero de Bens.
Además de las espectaculares vistas sobre esta zona rocosa de acantilados atlánticos, nos soprendió otro descubrimiento como fueron los restos de la antigua playa fósil, pues nunca habíamos reparado en este punto. Unas estructuras de cristal protegen los restos de una duna fósil formada hace 28.000 años, cuando el nivel del mar estaba más bajo que en la actualidad y los vientos empujaron la arena hacia arriba. Hay tres paneles que explican en detalle el tema.
Al llegar a O Portiño encontrarás un mirador con una escultura de Francisco Pazos denominada «Fiestra Aberta ao mar» y en la que te encontrarás algunos turistas sacándose fotos. Hay un aparcamiento mirando al mar, una cafetería y un área de servicio para autocaravanas, además del pequeño puerto y algunas casas.
La distancia total desde la Avenida de Labañou (Muncyt) hasta O Portiño ida y vuelta es de unos 7 km, aproximadamente una hora y media de trayecto, algo menos si lo haces desde el ascensor panorámico. En todo este tramo no encontrarás ningún sitio donde tomar algo ni fuentes para beber, creo que solamente vimos una ya en O Portiño. Así que conviene llevar una mochila y un botellín de agua, gorra o lo necesario pues es un tramo soleado y en los días de viento bastante fresquito.
El parque infantil más cercano está subiendo al Monte de San Pedro, lo que puedes hacer el coche o consultando el horario del ascensor panorámico. También hay un pequeño parquecito en el inicio de la Avenida de Labañou, frente al Muncyt, junto a una cafetería.
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Carmen Delia Díaz
, 26 de febrero de 2018
Carmen Delia Díaz
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Carmen Delia Díaz
Filóloga, periodista y guía turística oficial de Galicia, especializada en comunicación empresarial, recursos turísticos y turismo familiar y cultural
[…] os descubrimos nada si os hablamos del paseo marítimo de A Coruña, pero sí si nos centramos en su tramo más desconocido, entre el Millenium y O Portiño, un punto más tranquilo que el resto de esta famosa vía litoral. […]