El Parque de Atracciones de Madrid comenzó a construirse en el año 1968. Esto supone que hay ya unas cuantas generaciones de padres que crecimos con él, aunque no lo visitáramos más que de forma esporádica o en una excursión del colegio. Y se inauguró con 30 atracciones en mayo del 69. Desde entonces ha evolucionado, pero conserva una esencia especial, sobre todo en las zonas verdes y el resto de infraestructuras que no son las atracciones en sí. Compensa acercarse un fin de semana si tienes peques de más de 1 metro de altura, si no mejor esperar ya que apenas podrán montar en nada aunque tengan el pase gratis, al igual que los mayores de 65 años.
Madrid es una pura cola, da igual lo que quieras hacer sea comer en un restaurante, entrar en un musical o visitar El Escorial, miles de personas habrán planificado lo mismo para el día y hora en que tú lo has hecho. Los que somos de provincias no estamos muy acostumbrados, pero es el precio que hay que pagar para tener acceso a recursos que en otras ciudades no hay. En este parque también son tónica habitual las colas, mejor ir mentalizado porque si no las haces no podrás subir en prácticamente nada. Dicen los expertos que lo más inteligente es ir a las 12 en punto, cuando abre, ya que por la tarde está más concurrido aunque abre hasta tarde. Sobre todo porque ya sabemos lo que es hacer cola con niños.
Si vas pronto suele haber sitio para aparcar dentro del parking exterior o en la carretera a la sombra. La zona más interesante para los peques está entrando a la derecha, hacia el final del parque. Acaba de inaugurarse y es el área Nickelodeon. Aunque en el resto de zonas hay cosas como La Jungla, La Cueva de las tarántulas o Fantasía que también les gustarán mucho a los peques.
Está bien tener estas referencias porque lo de las alturas mínimas es un auténtico lío y muchos queremos saber en cuántas atracciones pueden montar los peques antes de pagar la entrada, o llevar el día algo organizado. La web del parque es bastante descriptiva pero te obliga a ir mirando atracción a atracción para el tema de las alturas mínimas o máximas. Además algunos permiten montar al niño solo y otros sólo acompañado, al margen de las alturas. Aunque la seguridad es máxima y el personal comprueba las barreras atentamente yo no dejaría a un niño de hasta 7-8 años solo en ninguna de estas atracciones. Siempre puede asustarse o sacar un brazo o una pierna y tener algún problema.
Los niños de más de 90 cm podrán montar en:
Los niños de más de 1,05 cm podrán montar:
Hay otras atracciones a partir de 1,20 cm, acompañando al niño o para él solo. Hay que fijarse bien en el cartel de acceso. La verdad es que el personal es muy amable y eso sí, estricto con las medidas de seguridad, cosa que se agradece. Llama la atención que se esfuerzan por ubicar a las familias o grupos juntos a la hora de llenar las atracciones.
Para comer tienes casi una decena de locales dentro del parque que van desde bocaterías, pizzerías hasta bufet libre. La hora de la comida es un poco caótica y no está excesivamente bien organizado por lo que, una vez más, te tocará esperar incluso si lo que quieres son unos bocatas. Pero en el parque está permitido entrar con comida por lo que puedes llevarte incluso una nevera con bebidas y sentarte en las zonas de merendero, los bancos o en las áreas verdes.
Tienes información muy detallada sobre horarios, precios y ofertas en nuestra taquilla del parque. Si sacas las entradas por internet con antelación puedes ahorrarte algún dinero y evitar colas a la llegada
Si vas a Madrid con niños te recomendamos también El Zoo Aquarium de Madrid con niños y el Parque histórico del Capricho. Y para saber cuáles son los mejores sitios para parar con niños en la A6 nuestro post: Áreas de servicio con zona infantil.