Hace tan solo unos días que este concello ubicado al norte de la Ribeira Sacra, inauguraba un punto de interés turístico en la Serra de Penas, en el Alto do Coto. El nuevo mirador de Bóveda ha atraído todas las miradas tanto de los vecinos de la zona como de los visitantes de otras zonas de Galicia. Os contamos el porqué de este atractivo.
La Ribeira Sacra es un geodestino integrado hasta día de hoy por 26 ayuntamientos. Se trata de Bóveda, Carballedo, Castro Caldelas, Chandrexa de Queixa, Chantada, Esgos, Manzaneda, Monforte de Lemos, Montederramo, Nogueira de Ramuín, Pantón, Parada de Sil, Paradela, Pereiro de Aguiar, A Peroxa, A Pobra de Trives, A Pobra do Brollón, Portomarín, Quiroga, Ribas de Sil, San Xoán de Río, O Saviñao, Sober, Taboada, A Teixeira y Xunqueira de Espadanedo.
Recientemente hemos sabido por los medios de comunicación que la Xunta de Galicia está pendiente de remodelar los geodestinos actuales, agrupaciones para la promoción y difusión turística de nuestra comunidad, y es factible que A Pobra de Trives, Manzaneda y San Xoán de Río se integren en el mapa de la Ribeira Sacra.
Pues bien, entre los concellos de este territorio de la Ribeira Sacra está el de Bóveda, de los pocos, junto con Esgos, Xunqueira de Espadañedo y Montederramo, que no están en la ribera del Sil o el Miño, cursos de agua que trazan este territorio.
Sin duda los miradores sobre el cañón del Sil y el Miño han sido un revulsivo para los flujos turísticos. Diseñados por diferentes arquitectos como Isabel Aguirre, autora del de A Cividade en Sober, atraen a público que quiere ver las vistas, pero también fotografiarse con los juegos de formas y materiales propiciados por la propia estructura.
El nuevo mirador de Bóveda, inaugurado en febrero de 2022, es ya uno de los considerados más espectaculares de este territorio que integra la Ribeira Sacra. Está diseñado por la arquitecta Consuelo Rodríguez, arquitecta municipal, que relataba estos días para La Voz de Galicia el reto que supuso su construcción.
El mirador de Serra de Penas ya está geolocalizado en Google, aunque por el momento no cuenta con señalización viaria más que en su camino de acceso. Situado a 3,4 kilómetros del centro de Bóveda, para llegar hay que tomar la LU-P-0903 en dirección al Campo de Fútbol.
Pasado este equipamiento deportivo, continuamos la carretera en torno a 2,4 kilómetros hasta ver una pista a la derecha con un cartel verde que ya indica hacia el mirador de Serra de Penas. Este último tramo debemos hacerlo por una pista de tierra más accesible para todoterrenos que para coches muy bajos.
Al llegar a una encrucijada vemos dos indicadores, el del antiguo mirador, a la derecha, hacia Serra de Penas, y el del nuevo, a la izquierda, en el Alto do Coto. En este punto hay una mesa de merendero y es un tramo que también merece la pena hacer caminando, pues se puede aparcar.
Esta infraestructura se levanta 10 metros sobre el Alto do Coto, a 681 metros de altitud. Está construido en madera y tiene forma de tirachinas o catapulta, es más impresionante verlo in situ que a través de una fotografía. Fue financiado con el Plan Camina, destinado a promocionar recursos turísticos en municipios con poca población.
Según se informó a raiz de su inauguración, sería el número 73 de los existentes en la Ribeira Sacra, y de los pocos que no están en la zona de ribera. Pero no por ello su vista es menos espectacular, pues desde este punto se alcanzan a ver hasta 17 municipios entre los que hay que destacar lugares como O Courel, los montes de Sarria o Monforte y el Valle de Lemos, además de Pena Trevinca.