Si habéis visitado Monforte de Lemos seguro que os ha llamado la atención uno de sus emblemas urbanísticos, el colegio del Cardenal, o Nuestra Señora de la Antigua, también conocido como el Escorial Gallego por ser el exponente del estilo herreriano en nuestra comunidad. En vías de ser declarado Bien de Interés Cultural, este monumento se visita y esconde algunos tesoros de gran relevancia.
La fisonomía urbana de Monforte de Lemos se equilibra entre la alta torre de Lemos y el conjunto de San Vicente do Pino, visible desde cualquier punto de la ciudad, y el inmenso edificio a orillas del Cabe que construyó el Cardenal Rodrigo de Castro Osorio, gran benefactor de Monforte.
Hace ya algunos años que se ha vuelto a poder visitar este edificio, que además de tener el uso de colegio de infantil, primaria y secundaria, cuenta con una iglesia abierta al público y una parte que se visita con un guía de turismo. La información podéis encontrarla en la puerta que está a la derecha de la iglesia, en la fachada principal, por la que está la conserjería del colegio.
Las visitas se realizan de martes a sábado a las 11:30 y 12:45 h por la mañana, y por las tardes a las 17 y 18:30 horas. Los domingos solo por la mañana. El coste de la entrada general es de 5 euros.
El recorrido dura en torno a una hora y abarca el claustro, la iglesia y la pinacoteca ubicada en la antigua sacristía, además de la escalera monumental. La explicación en sí o el itinerario no está adaptado para niños pequeños, pero si os interesa el arte y la historia puede resultar de lo más interesante. Por lo demás, se realiza todo en la planta baja por lo que es accesible para carritos sin mayor problema.
El edificio fue construido a instancias del Cardenal de Castro como centro educativo de Monforte de Lemos. Fue a partir de 1593, pero no se completaría como hoy lo vemos hasta 1913, cuando se vendió el cuadro «La Adoración de los Reyes», de Van der Goes, al Museo de Berlín, para terminar el colegio. La controvertida decisión ocupó numerosas páginas de la prensa de la época, y suscitó gran preocupación popular. La copia del mismo puede verse en una de las capillas laterales de la iglesia.
Inicialmente fue Real Seminario de Estudios y se considera uno de los centros educativos más antiguos de Galicia, junto con la Universidad de Santiago. Está levantado en piedra de granito de origen gallego.
Desde sus inicios lo gestionaron los jesuitas, hasta su expulsión de España en 1767 por Carlos III. A partir de 1873 el colegio pasó a ser gestionado por los Padres Escolapios y continúa siendo centro educativo, aunque ya no acoge internos, sumando hoy unos 500 alumnos.
Haciendo alusión a la Compañía de Jesús, orden religiosa de los jesuitas que inicialmente gestionó el colegio, os introducimos en otro de los sobrenombres con el que se conoce a Nuestra Señora de la Antigua. Y es que este edificio alberga algunas curiosidades que merece la pena conocer.