El histórico balneario de Guitiriz en familia

El balneario de Guitiriz en familia puede ser una experiencia fantástica para cualquier fin de semana que queráis descansar, tomar un contacto natural y conocer la interesante historia de este establecimiento. La cadena Iberik lo reabría en 2023 después de años de abandono, así que no hemos dudado en acercarnos a tomar las aguas de nuevo para contaros la experiencia.

Historia del balneario de Guitiriz

Allá por el 1908 rivalizaban en las páginas de los periódicos establecimientos para la moderna costumbre de tomar las aguas tan célebres como el Acuña de Caldas, Caldelas de Tui, Lugo o el Balneario de Guitiriz, que además ofrecía un completo informe técnico a los médicos que así lo reclamaran para conocer los beneficios de este tratamiento.

Y es que este del que hoy nos ocupamos, aseguraba nada menos, que estas aguas propiciaban «la curación de las enfermedades de hígado, estómago, bronquios, matriz y reumáticas», y para muestra, el informe técnico que podían facilitar a los facultativos para que lo recomendaran a sus pacientes.

Guerra y mezquita

Durante los primeros años del siglo XX y hasta la Guerra Civil fue un lugar de afluencia frecuente de las clases acomodadas, que seguían la moda de darse unos baños en Guitiriz. De hecho, un carruaje recogía a los clientes en la estación de tren y los llevaba hasta el hotel balneario, para que pasaran unos días recuperándose de sus todas sus afecciones.

No hay que olvidar, que la higiene y el aire puro se postularon en estos años como un tratamiento preventivo y curativo de primer orden, más al alcance de la burguesía que de las clases populares, no obstante en el recinto hay una fuente pública a la que la gente de la zona suele acudir para disfrutar de esta agua.

La irrupción del conflicto bélico de 1936 acabó temporalmente con esta costumbre, ya que el edificio fue usado como hospital de las tropas moras y se dotó además de una mezquita que aún se puede ver en el recinto.

Decadencia y resurgir

Lo cierto es que los balnearios cobraron nuevo auge a partir de los años 60, con los inicios del desarrollo del turismo y la popularización de las escapadas desde los 80 y 90.

En los primeros años del siglo XXI, y tras un par de décadas cerrado, fue la cadena Hesperia quien se hizo cargo de este edificio histórico y lo rehabilitó para volver a acoger tanto huéspedes para el balneario o el golf, como bañistas para sus piscinas que se pueden usar tanto por los clientes alojados como de forma externa.

Tras un nuevo cierre en 2017 tras años de problemas económicos, el establecimiento pasó por varios propietarios que no impidieron su declive, abandono y deterioro. A su decadencia vino pareja durante años la del pueblo en que se integra, afectado ya en su día por la construcción de la autovía A6.

2023 es el año en que la cadena Iberik, propietaria del balneario de Augas Santas en Pantón y otros 4 hoteles en diferentes rincones de España, reabrió el edificio después de una nueva reforma.

Aunque en estos primeros meses hay que darles un margen para entrar de nuevo en rodaje, lo cierto es que si paseáis por sus instalaciones se percibe de nuevo el brillo de antaño de un establecimiento que fue bandera en la comarca.

El balneario de Guitiriz con niños

Si también os gusta como plan de invierno una escapada a uno de estos lugares, el balneario de Guitiriz en familia o con niños, también en pareja o grupo, es una opción estupenda.

Cuenta con piscina infantil separada y permite acceso de niños desde los 2 años de edad en horario de 10 a 12 y de 16 a 18 horas. También tiene una completa carta de servicios que incluyen diferentes tratamientos y terapias, también masaje infantil.

Uno de los puntos fuertes del establecimiento es que está integrado en un bosque con diferentes especies de árboles, y rodean las piscinas por lo que resulta muy relajante ver naturaleza al otro lado del cristal.

El balneario de Guitiriz en familia tiene otros alicientes, como la práctica del golf si sois aficionados, el senderismo realizando la ruta da Auga y otros paseos por el entorno, o usar la ludoteca con juegos para los más pequeños.

Comer en Guitiriz en familia

Si os apetece probar cosas ricas por la zona os recomendamos en primer lugar el dulce típico de la zona, la torta de maíz que venden desde hace décadas en la panadería La Esquina y que merece la pena adquirir fresca si pasáis por allí. Por supuesto, en el bufé del desayuno del balneario también la hay, así que no dejéis de probarla.

Si queréis comer o cenar, a nosotros nos encanta el restaurante La Casilla, tenía un aire bastante de principios de siglo antes de su reforma, la verdad es que a nosotros nos gustaba, pero en cualquier caso la nueva gestión ofrece una buenísima opción para tomar algo con buena relación calidad precio, y atención cuidada. Además tiene jardín y algún juego infantil.

Ya en el casco urbano, está bien para picar algo o tapear el Casa Gaibor, buen producto y buenos vinos en un edificio de piedra y en las calles peatonales del pueblo.