Habíamos iniciado este paseo hace años, en un lluvioso invierno, pero estaba tan resbaladizo que lo dejamos para la primavera. Seguro que os habéis dado cuenta de que a nuestro alrededor quedan cada vez espacios naturales más pequeños y encapsulados. Uno de ellos está en un rincón de Oleiros y se conoce como Bosque dos Veciños. Hoy os llevamos de ruta por el bosque de Liáns con niños pequeños.
Para llegar a este parque podéis seguir las indicaciones que os llevan a la iglesia de Santa Eulalia de Liáns. Este templo barroco cuenta en su entorno con un bonito conjunto de cruceiro y cementerio con varias zonas más modernas y antiguas.
A la iglesia se accede desde el aparcamiento por una escalinata con una fuente. Hay un atrio enlosado que lleva desde la carretera hasta la puerta del templo, que conserva algunos retablos del siglo XVII.
Junto al aparcamiento veremos dos elementos interesantes, un lavadero, y más adelante, junto al regato, un puentecito que nos da acceso a un área recreativa bien equipada con mesas y bancos para comer.
Este espacio natural en el corazón del concello de Oleiros fue inaugurado en 2009 con el aspecto actual, es decir, con pasarelas para caminar y zonas biosaludables. Un espacio pequeño, con unos 120 metros de ancho por 300 de largo, aproximadamente, pero eminentemente tranquilo.
Una de las cosas más valoradas del parque son sus rincones de lectura. Con mesas y bancos bajo la arboleda, para sentarse a disfrutar solo escuchando el canto de los pájaros.
La ruta que podemos hacer aquí no llega a un kilómetro, así que es una buena opción con niños muy pequeños, si queremos que vean un bosque en miniatura. En él habitan pájaros carpinteros, petirojos, ardillas o tejones, y podemos ver árboles como castaños, robles o nogales.
Para completar el espacio que cuenta con iglesia, atrio, cruceiro y bosque está el Pazo de Lóngora. Un edificio del siglo XVIII levantado por Marcial Francisco del Adalid y que acogió interesantes encuentros intelectuales entre los siglos XIX y XX.
Fue donado a los Salesianos que lo abandonaron a mediados del siglo XX, y se recuperó al adquirirlo Aurelio Ruenes Blanco, que realizó una rehabilitación, y posteriormente, en 1980, la familia Mateo de Arenaza lo vendió pasando a manos del Concello de Oleiros.
Actualmente está cedido a la Universidad de A Coruña que lo usa como Instituto Universitario de Medio Ambiente y está cerrado al público, por lo que no es visitable.
Este pequeño bosque está en la parroquia de Liáns, en el concello de Oleiros, a 9 kilómetros de la ciudad de A Coruña.
Para llegar podemos coger la carretera de Perillo tras pasar el Puente del Pasaje, y seguir hasta después de las pistas del INEF, en Bastiagueiro, donde tomamos a la derecha por la Rúa Marcial del Adalid.
Otro modo es ir por Montrove, desde la AC-174, a la altura del Teleclub (O Bo Tapas), tomando la Rúa Casares Quiroga.
El jardín escondido de Montrove
Un parque con vistas y efecto sonoro
Beatriz
junio 6, 2020Hoy nos hemos adentrado a este pequeño bosque, un paseo muy reconfortante, muy cerquita, que no conocíamos. Ha sido una tarde muy aprovechada porque acabamos en la playa de Bastiagueiro viendo a los surferos y descansando respirando la brisa marina.
El bosque lo hemos encontrado sin dificultad pero el estado que presenta no es del todo cómodo, se nota el confinamiento en tareas de limpieza, mucha maleza y árboles tirados a causa de la climatología de invierno que azota en esta zona. De todas formas, ha sido un descubrimiento. Gracias Escapalandia por seguir enseñándonos rinconcitos verdes.
Carmen Delia Díaz
junio 7, 2020Hola Bea, gracias a vosotros, por dar vida a los contenidos del blog. Los lugares están ahí, otra cosa es el mantenimiento y el coronavirus parece que ha paralizado todo. Nosotros ayer mismo tuvimos que darnos la vuelta en una ruta después de muchos kilómetros porque solo habían limpiado la mitad y no se pasaba por la maleza… así está la cosa.