Empieza a hacer frío, y ya apetece hacer alguna escapada de esas de bufanda y gorro, pero con matices urbanos porque hay que buscarse planes para hacer con los peques. Castilla y León ofrece bastantes opciones a poca distancia de coche por carretera, y más provincias extensas como Burgos. Si eliges el fín de semana adecuado puedes moverte algo por zonas por las que anduvo el Cid Campeador, ver algo de arte, disfrutar de la gastronomía castellana e incluso acercarte a la nieve.

En Medina de Pomar, al norte de la provincia, se puede visitar el Alcázar de los Condestables, edificado por Fernández de Velasco y que se inició en el siglo XIV. Además de ver sus altísimas torres y murallas almenadas puedes visitarlo por dentro, ya que alberga el Museo Histórico de las Merindades, con bastantes maquetas, objetos antiguos y curiosidades varias.

Ermita mozárabe en Burgos

En Burgos es visita imprescindible su catedral, así que te tocará hacer algo de cola y acceder a este bellísimo templo gótico con retazos interiores de Barroco o Arte Renancentista. Sillería, claustro, vidrieras, la escalera dorada y hasta la misma tumba del Rodrigo Díaz de Vivar y Doña Jimena. El divertido Papamoscas, una figura que se mueve al tocar las horas, es un detalle que puedes enseñar a los más pequeños.

El casco antiguo de Burgos es una delicia y encontrarás restaurantes donde reponer fuerzas con un buen cocido castellano. El paseo del Espolón, junto al río Arlanzón, es perfecto para un paseo con patinete o caminando, y buscando rincones como el tiovivo, el palco de la música o sus sendas para caminar bajo los árboles.

Más al sur nos enganchamos al epicentro de la ruta del Cid y vamos hasta Santo Domingo de Silos. El origen de este centro cultural y religioso nos lleva hasta el siglo XI, de la parte románica apenas queda el claustro, y la iglesia actual es neoclásica. Seguro que has visto fotos del ciprés que ocupa el lugar central de su claustro. Todo el entorno del monasterio es muy bonito y se puede recorrer tranquilamente en una o dos horas. El lavadero, las calles del pueblo, el vía crucis en la ladera de la montaña o los cantos gregorianos. Si te gusta el arte y los antiguos monasterios tienes que conocer este lugar. Saliendo en dirección a Lerma te encontrarás la ermita mozárabe de Santa Cecilia, junto al río Mataviejas y en un entorno natural maravilloso.