Burela, con niños, y A Mariña Lucense

Nos acercamos a Burela casi por casualidad, con la idea de que era un pueblo muy industrial -tiene un gran puerto pesquero, el segundo del Cantábrico- y nos quedamos muy sorprendidos de lo salvaje y bonita que es toda la zona. La costa aquí es baja y hay grandes opciones de pasear todo el litoral, bonitas playas y unos parques infantiles muy chulos. Te contamos todo lo que puedes ver por la zona.

El principal atractivo es el puerto, sin duda, se puede acceder en coche, de hecho la oficina de información turística está en la entrada, a pocos metros del Barco Museo del Bonito. El Reina del Carmen  fue construido en el 1968, tiene 25 metros de eslora y, tras varias décadas de pesca, el Ayuntamiento decidió convertirlo en museo.

Se adaptó para recibir visitas hace ya 17 años, y resultó una iniciativa pionera al ser la primera embarcación musealizada de sus características de Galicia y probablemente de España. El recorrido es guiado, funciona en los meses de verano y en agosto de forma permanente. El coste de la entrada es de 3 euros los adultos y los niños gratuito hasta 12 años.

Realmente es impresionante recorrer las reducidas estancias en las que los marineros durante varias semanas pescaban, vivían, comían y descansaban. El guía es muy amable y conocedor del tema. En la bodega puedes ver toda clase de animales marinos disecados, desde un pez globo hasta crustáceos y conchas de todo tipo. Además de todos los artilugios de pesca y su funcionamiento. El puente de mando, la sala de máquinas, el pequeño aseo, la cocina y los camarotes, incluyendo el del patrón, resultan de lo más interesante e instructivo para los niños.

Por lo demás Burela tiene varias playas: Portelo, Penoural, Cabaliño, O Cantiño, Ril… y un paseo marítimo maravilloso casi a ras de un mar siempre embravecido y maravilloso de contemplar. También hay un mirador, en el Monte Castelo, con zona recreativa, y una amplia zona comercial.

Hay varios parques infantiles, pero nos encantó el que está junto a la Casa del Mar porque tiene zonas diferentes según las edades, y unos toboganes y columpios muy originales y divertidos.