La naturaleza es un libro abierto en el espacio natural de Cecebre. En el precioso entorno de este pantano en Crendes (Abegondo) o el entorno de los ríos Mero y Barcés podemos enseñar a los más pequeños mucho sobre las aves y en general sobre la naturaleza. Nidos de diferentes especies, una completa biblioteca, sendas para hacer con niños y hasta un pozo que habla ¿nos vamos?
Seguro que al escuchar «La Fraga de Cecebre» todos pensamos en lo mismo, la novela de Wenceslao Fernández Flórez donde se entabla una conversación mágica con la naturaleza. Pues bien en esta zona puedes visitar varios puntos de gran interés como la propia casa-museo del autor, que abre en horario de mañana y tarde los fines de semana y festivos. Está en Apeadeiro, 14 «Villa Florentina» y acceder tiene el coste de 1 euro.
El aula de naturaleza de Crendes está junto a la iglesia de San Pedro. Dejando la A6 en la salida de Mabegondo -Carral, se toma la carretera AC-542 desde donde está señalizado. El centro abre por las tardes y algunos fines de semana.
Además de una biblioteca sobre naturaleza pueden facilitarte mapas de la zona o explicarte cómo llegar al observatorio de aves que hay junto al pantano. A los peques les sorprenderán los diferentes tipos de nidos, una exposición de la vegetación y fauna de la zona así como diversos paneles explicativos.
Como al fin ha parado un poco de llover al fin hemos podido hacer la ruta que nos indicaron en el Aula de Naturaleza. Si dejas el coche junto a la iglesia y el parque infantil de San Pedro, donde hay amplio espacio para aparcar, puedes bajar por una pista por delante del parque hasta otra carretera. Caminando unos metros hacia la izquierda verás una senda de tierra y a lo lejos la caseta de observación de aves. Está cerrada pero puedes subir y desde la terraza admirar las vistas sobre este espacio natural. Solo escucharás cantar a los pájaros. Nosotros estuvimos un rato haciendo fotos, dibujándolas y viendo nadar a los patos y echando unas carreras por allí.
Después continúa el camino y ya entras en la ruta de «El Bosque Animado«, con paneles en piedra sobre diferentes animales y personajes de la obra de Wenceslao Fernández Flórez. Nosotros solo hicimos un tramo por ir con niños y porque en las zonas bajo arboleda estaba muy embarrado. En total menos de dos kilómetros volviendo hasta donde dejamos el coche.
Un paseo por Cambre, con niños
El parque de la playa del Pedrido
El torreón y parque infantil de Celas
La senda de Rego das Xesteiras
El jardín escondido de Montrove