Los papis con niños pequeños ya tenemos el bullicio incorporado en casa, nos guste o no, aunque el balance como siempre decimos es positivo. Así que seguro que os pasa como a nosotros y a veces buscamos lugares apacibles para llenarlos de esas carreras y grititos de emoción. En España será por destinos, así que hoy nos hemos puesto a recopilar nada menos que 20 lugares tranquilos para una escapada con niños. Seguro que en alguno de estos rincones encontráis vuestro lugar.
La Comarca del Bierzo esconde un sinfín de posibilidades de ocio y turismo rural, y una de las poblaciones que nos gustaron mucho fue esta, en pleno Camino de Santiago, la denominada Peñalba de Santiago. Campo y montañas en estado puro, con una gastronomía que siempre apetece, especialmente en lo más duro del invierno.
El interior asturiano mola y mucho. Seguro que os encanta la tranquilidad de esta población, en el corazón de la Sierra de Tineo. Montañas, valles, un casco antiguo con encanto y su tradicional juego de bolos. El Camino Primitivo pasa por aquí, por lo que veréis bastantes peregrinos, y también casas blasonadas y bonitos parques. Más info y ruta.
Un idílico rincón junto al lago del mismo nombre, en Queralbs, Girona. Lo conocimos hace ya algunos años y la verdad es que nos quedamos prendados de este lugar. Es genial para una escapada rural a la montaña, pues está a 2.000 metros de altitud, hay actividades para los niños, mucha naturaleza y buenos hoteles y alojamientos con habitaciones familiares.
Esta sierra ubicada a caballo entre Galicia y León tiene rincones en donde escucharéis la naturaleza. Merenderos en las cumbres, expresiones de tradiciones ancestrales plasmadas en pallozas, molinos, minas, etc. son solo algunas de las cosas que podemos encontrar en Candín, Pereda, Suarbol, Tejedo, Balouta y tantos pueblos que recorrer en una escapada por la zona. Más info.
Una población con casco antiguo medieval en lo alto de los cañones del Sil, en la Ribeira Sacra. Un fin de semana aquí es una ocasión estupenda para deleitarse con los paisajes de este geodestino gallego. La antigua torre del homenaje, las calles con nombres de sentimiento, y las vistas sobre el increíble espectáculo natural que cuelga montaña abajo. Más info.
El norte de Galicia es especialmente tranquilo y desconocido. Un antiguo espigon milenario, playas casi vírgenes y bellas poblaciones marineras. En Porto de Bares podrás pasear y cansarte de mirar el mar, en un tranquila escapada con niños en la que además puedes acercarte al faro y el observatorio de aves. Más info.
Un espacio con cabañas de madera y animales domésticos en plena Costa da Morte. La ruta de los naufragios y sus faros, las cascadas del río Castro o poblaciones cercanas como Muxía o Finisterre donde callejear y degustar la gastronomía de puerto de mar. Aquí la tranquilidad solo se ve alterada por algún pato, conejo o poni que se acerque a nuestro apartamento. Más info.
La primera vez que visitamos este lugar comprendimos que se podía escuchar el silencio, como nunca, si vienes de una ciudad, lo habrás oído. Embalse, antiguas minas, rutas de montaña y pura etnografía. Este rincón de Asturias muy cercano a Galicia, en la Comarca de los Oscos, tiene mucho que ver, como su espectacular museo etnográfico y un bonito parque infantil. Más info.
El gran hotel balneario es el centro neurálgico de esta población en los valles pasiegos de Cantabria. Tranquilidad, aguas medicinales con gran tradición, y trasiego de caminantes por la vía verde del Pas, un recorrido que merece la pena hacer aunque sea un tramo pequeño con niños. Más info.
Un municipio de 4.000 habitantes en la provincia de Huelva, cuyo principal foco turístico es el parque minero de Riotinto, musealizado y visitable, y una buena excursión que podemos hacer con niños. Por lo demás es una localidad tranquila, con parques infantiles chulos, rutas de senderismo y buenos locales de hostelería. Más info.
Una pequeña población de montaña en la provincia de Guadalajara, con mucho encanto. Recuerdo que fuimos en invierno y estaban los almendros en flor, todo el entorno es maravilloso. La ruta de los pueblos negros y rojos, románico y mucha tranquilidad… ¿perfecto para una escapada con niños, no?
Un lugar que también nos encanta y además está muy cerca de Madrid. En su día estuvimos alojados en el Hotel Rural Torreblanca, que además de amplias habitaciones tiene un restaurante muy bueno, mesas en la terraza de fuera y junto a un pequeño parque infantil. Desde aquí podéis hacer excursiones por este parque natural. Más info.
Una bellísima localidad marinera asturiana, al pie de los Picos de Europa. Su paseo marítimo, el puerto pesquero, o sus tradicionales tiendas y tranquilas calles. A unos pocos kilómetros podéis hacer la ruta de los molinos o ver el pintoresco pueblo de Cuevas, al que se entra por una cueva. También está el centro de interpretación de la Cueva de Tito Bustillo. Más info.
Un auténtico descubrimiento en la ruta de Don Quijote, donde visitar un auténtico molino de viento harinero en funcionamiento en determinados días. Hay quien piensa que el lugar de La Mancha de cuyo nombre no quiso acordarse Cervantes era precisamente éste. Muy cerca no dejéis de ver el Complejo Lagunar de Manjavacas, con área recreativa y parque infantil, además de caseta para observar aves. Más info.
En el entorno de los Montes Torozos, en la provincia de Valladolid, está una antigua población de colonos. Allí se encuentra un lugar de peregrinación milenario como es el Monasterio de la Santa Espina, que guarda una espina de la corona de Cristo traída de Francia. Rutas, sendas fluviales, naturaleza y parque infantil. Más info.
En la Vega baja del Segura está la localidad de Orihuela, en Alicante, con un casco antiguo declarado conjunto histórico artístico. Castillo, murallas, torres y palacio, además de unos sabrosos dulces típicos y fiestas de Semana Santa con gran relevancia. Os encantará el belén municipal, que se puede ver en la época navideña en el Palacio Episcopal.
Una bella población de Cáceres con casco antiguo de los siglos XVI – XVII. Palacios, torres, iglesias y, en la cima, un enorme castillo que esconde la ermita de la Virgen de la Victoria. Os encantarán sus tiendas de ultramarinos, pastelerías y restaurantes. En Navidad ponen una ruta de belenes que merece la pena recorrer. Más info.
En esta localidad ourensana encontrarás un paisaje natural de gran belleza en el entorno del río, y una ciudad peatonal con mucha historia donde comprar en los outlets de importantes firmas de moda. Iglesias, museos, restaurantes y chulísimos parques infantiles. Te contamos la mejor ruta para hacer con niños. Más info.
Esta tranquila ciudad zamorana enamora por su plaza mayor, la antigua judería, la catedral o el casco antiguo. La gastronomía es excelente y además su ubicación permite acercarse a conocer las lagunas de Villafáfila y hacer un poco de turismo ornitológico. Más info.
Nos encantó por la cantidad de parques infantiles y zonas verdes que tiene como el Jardín Botánico o el Parque de las Esculturas. Una ciudad llana, a pocos kilómetros de Bilbao, en la orilla del río Nervión, provincia de Vizcaya. Su ubicación estratégica es perfecta para conocer todo el entorno y el Bilbao Exhibition Center, la Feria de Muestras. Más info.